jueves, 29 de septiembre de 2011

Pum - Pum.


Que parece que ando por otros sistemas solares y deje mi cuerpo de recuerdito. Eso es lo que piensas, ¿eh?

Momento, cariño porque no es que no esté aquí. No es que no sea yo, ni que no te busque.

No, no es que anhele otros futuros, viva otros presentes y sueñe con otros pasados que no son los míos.

Suene como suene, tan normalito como se lee, es la merita verdad.

Pero los veo, y los siento, y los escucho.

Y entonces el calor se expande desde al corazón, hacia los dedos de las manos, hacia los dedos de los pies.  Con esa quimera de cosquillas inexplicable. Con ese sentir que parece lo más lógico del mundo. Lo más correcto. Pum – pum. Corre por la venas como en revolución, corre por todo el cuerpo. Más allá del cuerpo. Hacia ti. Hacia ellos. Para quien lo quiera recibir.

De mí al mundo. Un cachito de Zaka para dar.

sábado, 17 de septiembre de 2011

¡Con ganas!


¡Ay! , Si se pone peluda la cosa, recuerde: La vida, es color de rosaa

Y a veces duele. Y a veces se siente vacio, silencio y soledad; y es todo negro y no encontramos el botón para encender la luz –de hecho, dudamos que haya alguno por ahí.

Y el alma pesa más que el cuerpo, y las sonrisas duelen más que el llanto; y están todos junto a ti… pero tan distantes… tan intocables: tan imposibles.

Y gritas al cielo, al suelo, al aire y al infinito ¿Por qué? 

Pero no hay respuesta.

Y tampoco hay consuelo.

Pero cuando te cueste dar un paso más, soy yo quien te ayudara a seguir el camino, cuando no te queden fuerzas para sonreír, soy yo quien te dará un motivo, cuando llorar parezca más fácil que reír, lo hare por ambos, pero sobre todo, cuando pienses que no vale la pena; te voy a pegar. ¡Con ganas! 

(Juanmi; va pa ti. Y que no se te olvide, ¿eh?)

lunes, 29 de agosto de 2011

• De Dinosaurios y sucedidos. •



Había una vez una niña que soñaba que estaba dormida; en el sueño soñaba que la perseguía un dinosaurio: verde, con garras y dientes. Y despertaba. Pero seguía dormida. Y no podía despertar del sueño en el que soñaba.

Y entonces en alguna realidad alterna, este cuento que no es cuento, tenía sentido.

Pero yo nunca lo tengo así que difícilmente podría tenerlo.

Entonces me enredo en cables de palabras, que se hacen estambre, se tejen en bufandas, y me las cuelgo al cuello, pues para eso son las bufandas.

Oh si. Cerebro derretido ;)

Zakita Said So :D


viernes, 22 de julio de 2011

Gira y da vueltas, y rueda girando.


Pero con todo y todo, este concepto de objetividad me suena subjetivo. Porque, ¿Quién define lo que es considerado objetivo? ¿Para quién? Además, ¿no se da una opinión en base a criterios propios? Entonces, si estás viendo las cosas de fuera, las sigues viendo regido por tu concepto de moralidad y valores.

Hombre, yo soy subjetivamente objetiva. Es un hecho.